El escándalo por la detención del despachante de aduana, Ulises Curá, primo del candidato a diputado nacional de Primero los salteños, Juan Cruz Curá, por el hallazgo de 500 kilos de cocaía en un torno importado de Bolivia, incomoda al poder político.
UIises Curá, primo hermano de senador provincial por Orán y candidato a diputado nacional, Juan Cruz Curá, fue detenido en el marco de la investigación por el hallazgo de media tonelada de cocaína en un torno que fue importado desde Bolivia para ser enviado a Europa.
A Curá se le allanaron las oficinas en las que desarrolla sus tareas como despachante de aduanas, debido a que tramitaba la exportación de la máquina en la que fue hallada la droga.
Según se supo, el despachante fue alojado en la sede de la Policía Federal de Orán y ya prestó declaración indagatoria por Zoom. La causa busca establecer el grado de responsabilidad de Curá, además de determinar qué controles aduaneros y de seguridad fallaron y permitieron un contrabando de drogas de tal magnitud.
Curá declaró en Comodoro Py, ante el Juzgado en lo Penal Económico Nº 8, y esta semana la Justicia analizará su teléfono celular junto con la documentación aduanera, antes de resolver el pedido de libertad presentado por la defensa.
Tras la detención de Ulises Curá, se conoció una fotografía en la que posa para la foto junto al gobernador Gustavo Sáenz, su primo, el senador Cruz Cura, el exintendente de Orán, Pablo González, la actual diputada Patricia Hucena y otras personas en un galpón.
Según se comenta, la fotografía fue tomada hace aproximadamente cinco años, pero la cercanía con alguien que está siendo investigado por un grave delito de narcocriminalidad, causó preocupación en el entorno de Sáenz.
Los vínculos del poder político de Salta con el narcotráfico, que fueron advertidos ante tribunales federales, siguen representando un aspecto incómodo para el oficialismo provincial.
Fuente: Opinorte

Foto de Archivo
Por otra parte Radio Orán brinda más detalles de la situación:
Según la causa, Curá habría intervenido en los trámites para el ingreso de una maquinaria proveniente de Bolivia a través del paso fronterizo de La Quiaca. Ese torno, que luego fue enviado a España, ocultaba en su interior 500 kilos de cocaína, detectados por la Policía Nacional en Europa.
El despachante declaró ayer ante el Juzgado en lo Penal Económico Nº 8 de Comodoro Py. La justicia deberá ahora analizar sus movimientos, los registros de Aduana y las comunicaciones de su teléfono celular para resolver el pedido de libertad solicitado por la defensa.
El abogado Joaquín Vélez aseguró que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, “montó una historia espectacular para los medios”, presentando el caso como un operativo histórico de la Policía Federal. Según el letrado, se trata en realidad de una causa iniciada en España, en la que la Argentina intervino recién en la última etapa.
Vélez remarcó que Curá no integra ninguna red internacional de narcotráfico y que su detención es “preventiva”, vinculada únicamente a su función como despachante en la importación de la máquina. El abogado subrayó que el proceso judicial en el país se limita a un posible delito económico y no a contrabando de estupefacientes, causa que continúa bajo secreto de sumario en la justicia española.
Mientras tanto, el caso sigue generando repercusión nacional. La ministra Bullrich mencionó el secuestro en un acto oficial, enalteciendo el trabajo de la Policía Federal, mientras la defensa insiste en que la versión difundida es “falaz” y desvía el verdadero origen de la investigación.







