En medio de la polémica por los 5 millones de kilo de alimentos retenidos en dos galpones de Capital Humano, la OEI se desligó de las contrataciones de personal efectuadas por la cartera que conduce Sandra Pettovello, quien a días de conocerse el caso denunció a uno de sus funcionarios, Pablo De La Torre, por «falta de transparencia».
En medio por el escándalo por los 5 millones de kilos de comida retenidas en galpones por el gobierno de Javier Milei, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), con quien el MInisterio de Capital Humano mantiene un acuerdo, salió a despegarse del nombramiento de Pablo de la Torre. El organismo negó que haya tenido injerencia en la designación del ex Secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, quien fue despedido por la ministra Sandra Pettovello entre acusaciones y supuestas denuncias de corrupción.
Pettovello pidió la cabeza de De la Torre este jueves. Desde Casa Rosada habían primero culpado a la gestión anterior y luego intentaron dar a entender que se trataba de un remanente para supuestas «catástrofes climáticas». Finalmente, Pettovello echó al funcionario y el Ejército empezó a distribuir los 5 millones de kilos de comida que estaban por vencerse, luego de que la justicia federal le diera un plazo de 48 horas para delinear un plan de entrega de los alimentos para entregar a comedores y merenderos afectados en medio de la crisis económica.
«En relación con la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, la OEI llevó a cabo la contratación de prestadores para diversas funciones solicitadas por dicha dependencia. La selección de perfiles corresponde exclusivamente a la Secretaría, mientras que la OEI se limita a ejecutar las decisiones y procedimientos establecidos por esta», explicó la OEI en un comunicado.
El organismo -que tiene un presupuesto de cooperación con el país de más de $6.000.000.000 para financiar proyectos en 20 provincias– planteó que «cualquier inconsistencia detectada en los procesos es comunicada fehacientemente, para que la Secretaria determine las acciones a seguir».
La OEI, considerado el principal órgano de cooperación multilateral en Iberoamérica, detalló que al inicio de la gestión del presidente Javier Milei firmó junto al Ministerio de Capital Humano «un convenio para la prestación de personal transitorio y la adquisición de alimentos destinados a mejorar la calidad nutricional de familias en situación de vulnerabilidad».
Pero a todo esto se le suma una diputada de la libertad avanza que se quedó con 3.580 Litros de leche que tenían como destinatario al comedor Los principitos de Retiro y de Villa 31.
Se trata de la legisladora porteña, Lucía Montenegro, quien había encabezado una iniciativa solidaria denominada “desafío tambero”, precisamente para conseguir leche para comedores de la villa 31.
Pero ayer el periodista Pablo Duggan, denunció que a la fecha, la diputada de LLA tiene la inmensa mayoría de las botellas de leche en un local de su propiedad y un comedor denuncia que solo le entregaron una cantidad muy menor a lo acordado.
Según figura, la leche fue retenida en un gimnasio de propiedad de Montenegro, ubicado en la Calle Junín 322 en Once, Capital Federal, y conocido por su nombre CHAIU DO KWAN. Además, el periodista adjuntó un recibo firmado por la legisladora, en donde queda expuesta la entrega de toda esa mercadería.
La respuesta de la diputada libertaria habría sido que el camión de la Serenísima se negó a ingresar a la villa, por lo que terminó depositando la leche en ese local. En donde, desde allí, se debería haber relocalizado la mercadería hacia los comedores y merenderos.
Duggan afirmó que la legisladora prometió llevar toda la leche al comedor Los Principitos, pero sólo entregó 500 litros, reteniendo los 3.500 litros restantes. Además, mencionó que el padre de Montenegro declaró que no iban a entregar la leche y aseguró que los camiones sí pueden ingresar a la villa, contradiciendo la versión de la legisladora.
Fuente: El Destape y Arg Medios
